Clasificación Orden Charadriiformes; familia Alcidae
Longitud 38-45 cm
Envergadura 64-73 cm
A fin de enero, los araos se reúnen cerca de los acantilados en que van a criar. Cuando hay un número suficiente, comienzan unas ceremonias en las que los grupos «danzan» en el agua. Entrelazándose y esquivándose, las aves chapotean sobre las olas; de repente, el bando entero se sumerge y la «danza» continúa bajo el agua. Los araos también toman parte en vuelos comunales de exhibición, en bandos de cientos de individuos, girando, elevándose y sumergiéndose al unísono. Estas aves no construyen nido. La hembra pone su único huevo en la roca desnuda. Gracias a su forma de pera, si es empujado o arrastrado por el viento, no rodará fuera del acantilado. Cuando los araos han puesto, las cornisas están repletas de aves alineadas casi hombro con hombro, a menudo mirando hacia el mar con el huevo sujeto entre las patas. Son muy escasa las parejas que anidan en la Península
Tras su llegada a las cornisas de acantilados en primavera, dejan un amplio espacio entre un ave y otra; pero las cornisas se rellenan rápidamente con aves que se empujan mutuamente, combinando sus gritos «arr» en un coro acalorado, mientras luchan por obtener un sitio para anidar.
Identificación: Pico puntiagudo; partes superiores pardo oscuro en verano, más grises en invierno; es menos común la variedad "bridada" (aves con anillo ocular blanco y línea blanca que partiendo del ojo se dirige hacia los lados de la cabeza); sexos iguales.
Nidificación: Cría en cornisas rocosas; pone, en mayo-junio, un huevo en forma de pera, muy variable en color, generalmente con manchas amarillas, pardas o negras; incubación, por ambos sexos, de 32 a 36 días; el pollo, alimentado por ambos padres, se echa al mar tras unos 16 días acompañado por sus padres.
Alimentación: Peces, moluscos, gusanos; algunas algas.